Nuestra señora de la Cabeza, de Torrenueva, es una talla de madera de pino de 1939, que sustituye a una “fernandina”, del siglo XIII (tiempos de Fernando III el Santo); que fue destruida en la guerra civil. Fue donada por Ramón Alonso, tras encargarla en Valencia. La última restauración la hizo Julián De Campos, catedrático de bellas artes, en el año 2004. Entonces “estaba toda rajada e incluso hubo que hacerle arreglos en las extremidades”.
El jueves 26 de marzo una patrulla de la Guardia Civil de Torrenueva descubrió que en la ermita de la virgen se había producido un robo. Este robo ha provocado la indignación en el pueblo, sobre todo porque la talla de la imagen apareció tirada en el olivar cercano, sucia, sin manto, ni mandil ni corona ni alhajas, aunque sin destrozos, “lo peor hubiese sido que la hubieran estropeado, por fortuna no ha sido así”, explicó a este periódico el presidente de la Hermandad de la Virgen, Salvador Isardo, más tranquilo tras acompañar a la policía científica de la Guardia Civil de Valdepeñas que se desplazó al santuario entrada la mañana a recoger huellas e indicios. La Virgen no sufrió daño alguno, pero la ermita y el camarín sí, que ha habido que reparar estos días.
Según la alcaldesa, Concepción Vivar, la prenda más valiosa del botín es el manto, valorado en unos 12.000 euros, aunque no era el de las grandes ocasiones. Con el resto de destrozos, se alcanzan los 20.000 euros.
El resto son joyas pero tampoco de mucho valor, de hecho al párroco, Alejandro Molina, le extraña que se hayan dejado la pulsera más valiosa y otros objetos de la ermita, lo que hace presuponer que la acción fue precipitada, posiblemente porque el autor o autores se vio sorprendido por la Guardia Civil. “No iban a cometer ningún acto de vandalismo, iban a robar”, añade el presidente de la Hermandad, Salvador Isardo, que confía en que la patrona pueda regresar a la ermita “pronto”. De momento la talla está a buen recaudo en la casa de hermandad.
Luz a la 1.30 horas
La ermita de la Virgen de la Cabeza, donde la patrona de Torrenueva pasa la mayor parte del año, está a dos kilómetros de Torrenueva, en una loma y se ilumina por la noche hasta las doce. Este miércoles ocurrió así. Pero una hora y media después una patrulla de la Guardia Civil que hacía su ronda habitual por el municipio observó luz en el interior, algo extraño a esas horas, y se dirigieron al santuario, cuando llegaron no quedaba ni rastro de los asaltantes pero sí los destrozos en las puertas y en el interior del santuario del que faltaba ¡la Virgen! El susto fue momentáneo, al iluminar con sus linternas el exterior por si encontraban a alguien escondido observaron algo brillar bajo una olivo: era la patrona, pero ni rastro de los asaltantes que sin embargo si han dejado “algunas pistas”, incluido una manchita de sangre que en estos momentos analiza la policía judicial.
Dos desconocidos
Sobre la autoría no hay nada claro. El santero, la persona que se encarga del cuidado de la ermita de la Cabeza, observó el miércoles sobre las seis de la tarde a dos personas de aspecto sospechoso merodeando por las inmediaciones, pero no le dio mayor importancia.
En cuanto a la imagen, el presidente de la Hermandad subraya de que saldrá en la procesión de San Isidro en mayo y que el robo no va a afectar a los próximos cultos de Semana Santa, la misma Hermandad de la Virgen, con unos 1.300 hermanos, se encarga de la Semana Santa.
La Virgen recuperó el jueves por la tarde su aspecto habitual, tras una simple limpieza. La patrona de Torrenueva dispone de un amplio ropero. El manto desaparecido se ha sustituido por otro y lo mismo el resto de ropajes. Lo que no esta tan claro es cuándo volverá la talla a su camarín en la ermita. Según el párroco se va a estudiar instalar algún sistema de seguridad adicional a los que ya existen, como una alarma o videovigilancia. Una idea que también ha sugerido la alcaldesa. Cuando se decida lo que hacer y se repare la puerta se volverá a trasladar al santuario la Virgen.
El jueves 26 de marzo una patrulla de la Guardia Civil de Torrenueva descubrió que en la ermita de la virgen se había producido un robo. Este robo ha provocado la indignación en el pueblo, sobre todo porque la talla de la imagen apareció tirada en el olivar cercano, sucia, sin manto, ni mandil ni corona ni alhajas, aunque sin destrozos, “lo peor hubiese sido que la hubieran estropeado, por fortuna no ha sido así”, explicó a este periódico el presidente de la Hermandad de la Virgen, Salvador Isardo, más tranquilo tras acompañar a la policía científica de la Guardia Civil de Valdepeñas que se desplazó al santuario entrada la mañana a recoger huellas e indicios. La Virgen no sufrió daño alguno, pero la ermita y el camarín sí, que ha habido que reparar estos días.
Según la alcaldesa, Concepción Vivar, la prenda más valiosa del botín es el manto, valorado en unos 12.000 euros, aunque no era el de las grandes ocasiones. Con el resto de destrozos, se alcanzan los 20.000 euros.
El resto son joyas pero tampoco de mucho valor, de hecho al párroco, Alejandro Molina, le extraña que se hayan dejado la pulsera más valiosa y otros objetos de la ermita, lo que hace presuponer que la acción fue precipitada, posiblemente porque el autor o autores se vio sorprendido por la Guardia Civil. “No iban a cometer ningún acto de vandalismo, iban a robar”, añade el presidente de la Hermandad, Salvador Isardo, que confía en que la patrona pueda regresar a la ermita “pronto”. De momento la talla está a buen recaudo en la casa de hermandad.
Luz a la 1.30 horas
La ermita de la Virgen de la Cabeza, donde la patrona de Torrenueva pasa la mayor parte del año, está a dos kilómetros de Torrenueva, en una loma y se ilumina por la noche hasta las doce. Este miércoles ocurrió así. Pero una hora y media después una patrulla de la Guardia Civil que hacía su ronda habitual por el municipio observó luz en el interior, algo extraño a esas horas, y se dirigieron al santuario, cuando llegaron no quedaba ni rastro de los asaltantes pero sí los destrozos en las puertas y en el interior del santuario del que faltaba ¡la Virgen! El susto fue momentáneo, al iluminar con sus linternas el exterior por si encontraban a alguien escondido observaron algo brillar bajo una olivo: era la patrona, pero ni rastro de los asaltantes que sin embargo si han dejado “algunas pistas”, incluido una manchita de sangre que en estos momentos analiza la policía judicial.
Dos desconocidos
Sobre la autoría no hay nada claro. El santero, la persona que se encarga del cuidado de la ermita de la Cabeza, observó el miércoles sobre las seis de la tarde a dos personas de aspecto sospechoso merodeando por las inmediaciones, pero no le dio mayor importancia.
En cuanto a la imagen, el presidente de la Hermandad subraya de que saldrá en la procesión de San Isidro en mayo y que el robo no va a afectar a los próximos cultos de Semana Santa, la misma Hermandad de la Virgen, con unos 1.300 hermanos, se encarga de la Semana Santa.
La Virgen recuperó el jueves por la tarde su aspecto habitual, tras una simple limpieza. La patrona de Torrenueva dispone de un amplio ropero. El manto desaparecido se ha sustituido por otro y lo mismo el resto de ropajes. Lo que no esta tan claro es cuándo volverá la talla a su camarín en la ermita. Según el párroco se va a estudiar instalar algún sistema de seguridad adicional a los que ya existen, como una alarma o videovigilancia. Una idea que también ha sugerido la alcaldesa. Cuando se decida lo que hacer y se repare la puerta se volverá a trasladar al santuario la Virgen.
Solidaridad
El robo ha desatado una oleada de solidaridad con la Hermandad de la Virgen, sobre todo de torreveños emigrantes que se han ofrecido a sufragar los daños y a reponer con donativos lo robado. “La gente del pueblo no para de preguntarme por lo que ha pasado, y también muchos que no vive aquí pero que se han enterado de la noticia y se han volcado; me dicen oye Salvador que yo quiero pagar esto o lo otro..., a la gente le ha dolido un montón lo que le ha pasado a la Virgen”, explica el presidente de la hermandad, Salvador Isardo.
De momento no ha habido detenciones, “yo creo que va a ser difícil coger a quien haya sido”, dice Isardo, y explica que la prioridad ahora es colocar una nueva cerradura en la puerta de acceso principal, cerrada con un candado provisional, “y colocar la imagen en su sitio lo antes posible”.
Para eso la hermandad, que guarda en su sede la talla de la patrona de Torrenueva, habló con varios operarios para que el lunes 30, como muy tarde, pudiesen comenzar los arreglos en la ermita.
Desde Badajoz, Julián de Campos, catedrático de Bellas Artes y autor “de las tres restauraciones que se le han hecho a la imagen en los últimos años” expresó en Lanza su consternación al enterarse de la noticia además de aclarar que la talla actual de la Virgen de la Cabeza, una virgen niña, “es toda de madera de pino, no hay nada de escayola”. De Campos está deseando ir a su pueblo, Torrenueva, para pasar la Semana Santa y comprobar que tal y como le han dicho la Virgen no ha sufrido ningún desperfecto, para él lo más importante.
Misa de desagravio
Torrenueva celebró el pasado jueves 2 de abril una misa “de desagravio y reparación de daños espirituales” a la Virgen de la Cabeza.
Se esperaba que fuera “todo el pueblo” en procesión hasta la ermita, dice Isardo. Aparte de que se anunció en todas las misas de estos días, también se han colocado carteles alusivos para atraer a la gente, conmocionada aún por lo que le ha ocurrido a la patrona. Con la misa de hoy la hermandad espera pasar página y seguir adelante con los cultos de Semana Santa.
La mañana del 2 de abril fue trasladada de nuevo la imagen al santuario, en el que permanece la mayor parte del año. Pero además y para “desagraviar” a la patrona el pueblo entero acudió por la noche a celebrar allí, de manera excepcional, la misa diaria que se celebra en la parroquia.
Fuente consultada: Diario lanza, Belén Rodriguez
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